Según ha informado en un comunicado este lunes, Sabaté sustituirá a Bruno Domínguez, quien continuará liderando el área fiscal y de gestión de patrimonios del despacho en Barcelona.
Sabaté, que empezó a trabajar en el despacho en 2001, ha agradecido la confianza y ha asegurado que trabajará para consolidar la "posición de liderazgo entre las firmas internacionales" que tiene Baker McKenzie.
Domínguez ha defendido la apuesta de Baker McKenzie "por realmente definir, construir y gestionar carreras profesionales" que hacen crecer a los abogados.
El despacho de abogados tiene 75 años de historia y cuenta con 13.000 profesionales que abordan cuestiones legales internacionales y que requieren asesoramiento de múltiples áreas.