No obstante, el resultado neto atribuido subyacente, que excluye el impacto de ciertos elementos y de la hiperinflación, aumentó un 24,7% en el periodo, hasta los 1.811 millones de dólares (1.678 millones de euros).
Los ingresos de la multinacional alcanzaron los 15.333 millones de dólares (14.204 millones de euros), un 1,4% más que un año antes en términos generales y un 2,7% más en datos orgánicos.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) normalizado se situó en 3.905 millones de dólares (3.617 millones de euros), un 9,4% más en cifras absolutas, pero un 11,9% más si estas se cuantifican de manera orgánica.
De su lado, el sumatorio de gastos de producción, por ventas, generales, administrativos y otros ascendió a 11.428 millones de dólares (10.586 millones de euros), un 1,1% menos.
El acumulado de los seis primeros meses arrojó unos beneficios de 2.564 millones de dólares (2.375 millones de euros) y una facturación de 29.880 millones de dólares (27.679 millones de euros). Estas cifras son un 29,7% y un 1,9% superiores, respectivamente, en comparativa interanual.
"Nuestro impulso global continuó este trimestre. La solidez de nuestra diversificada presencia y la demanda de nuestras 'megabrands' por parte de los consumidores nos han permitido registrar otro trimestre de crecimiento generalizado de los beneficios y los resultados", ha afirmado el consejero delegado de AB InBev, Michel Doukeris.
De cara al conjunto del ejercicio, AB InBev espera que su Ebitda crezca a medio plazo entre un 4% y 8% y que los gastos netos por intereses de pensiones y los gastos de acumulación oscilen entre 220 y 250 millones de dólares (203,8 y 231,6 millones de euros) por trimestre, dependiendo de las fluctuaciones de la moneda y los tipos de interés.