Más de la mitad de los gallegos reconoce que la preocupación por el aumento en el coste de las facturas está teniendo un efecto negativo en su bienestar.
La inflación en el mes de julio ha vuelto a subir. Tal y como muestran los últimos datos adelantados por el INE se sitúa en el 2,3%, produciéndose un aumento de un 0.4%. Así, la inflación subyacente, que excluye los elementos más volátiles como la energía y los alimentos frescos y que se considera la inflación tendencial, continúa elevada con un aumento del 0,3% respecto al mes anterior, situándose en un 6,2%.
Ante este contexto inflacionista, ahorrar para el futuro resulta difícil para muchos ciudadanos. De hecho, tal y como recoge el Informe Europeo de Pagos de Consumidores de Intrum, al 76% de los gallegos les genera inquietud no poder permitirse una jubilación holgada. Una cifra seis puntos por encima de España (70%) y catorce puntos por encima de la media europea (62%). Así, España se sitúa entre los 10 países más preocupados sobre su jubilación, en un listado encabezado por Portugal (79%), y por encima de Francia (60%), Alemania (58%), Reino Unido (57%) o Italia (55%).
Los ahorros son una pieza fundamental para asegurar una jubilación sin preocupaciones. Sin embargo, el contexto económico actual y el encarecimiento del coste de la vida está provocando que un número cada vez mayor de personas se vean en la obligación de tirar de sus reservas económicas. Así, el estudio realizado por Intrum revela que un 76% de los encuestados en Galicia teme que la inflación reduzca sus ahorros en efectivo. En España, el porcentaje de respuesta desciende al 73%, una cifra que se encuentra dos puntos por encima de la media europea (71%).
Más de la mitad de los gallegos afirman estar preocupados sobre el impacto de la inflación en su bienestar
En los últimos meses, el aumento generalizado de los precios también ha llevado a un encarecimiento de la vida cotidiana que, en muchas ocasiones, se traduce en un mayor estrés financiero para los ciudadanos. En este sentido, más de la mitad (52%) de los encuestados en la región indica que la preocupación que le provoca el incremento del coste de las facturas está teniendo un efecto negativo en su bienestar. En términos nacionales, este porcentaje se encuentra en el 51%, 10 puntos por encima del registrado en 2021, lo que reflejaría que la población cada vez presta mayor atención a este aspecto.
No obstante, el porcentaje español se sitúa 7 puntos por debajo de la media europea (58%). El informe realizado por Intrum señala que, de los 24 países analizados, Grecia (78%), Letonia (71%) y Portugal y Polonia (70%) se posicionan como aquellos en los que más habitantes se muestran más preocupados. Por el contrario, en el otro extremo se encuentran Noruega (47%), Dinamarca (46%) y Países Bajos y Suiza (45%).