La campaña, promovida por el Ministerio del Mar, tenía como objetivo destacar la versatilidad de los productos marinos y subrayar el esfuerzo de la comunidad de profesionales que participan en la extracción, producción, comercialización y transformación de diversas especies, haciéndolas accesibles a todos los consumidores.
Luego de recorrer múltiples localidades a lo largo de España, incluyendo rutas por el Camino de Santiago, las cuatro furgonetas de la campaña regresaron a Galicia. Estos vehículos itinerantes ofrecieron degustaciones de pescado y marisco en el transcurso de sus rutas. Los 'food trucks' brindaron una variedad de snacks elaborados con productos marinos certificados de Galicia, como el Berberecho de Noia, el Mexillón de Galicia, el bonito del norte, y distintos pescados y mariscos respaldados por el sello de calidad pescadeRías.