A través de esta asociación, Mango adoptará fibras producidas con pulpa Circulose, que se fabrica a partir de residuos de algodón reciclados en un proceso químico.
El objetivo es "incorporar este material innovador en sus colecciones de productos, asegurando total transparencia y trazabilidad a lo largo de la cadena de suministro", explican.
"Esta colaboración marca un paso en nuestra hoja de ruta de sostenibilidad mientras nos esforzamos por usar exclusivamente fibras con menor impacto ambiental en 2030 y refleja nuestro compromiso de fomentar un ecosistema de moda más circular y responsable", ha afirmado el director de Sostenibilidad y Sourcing de Mango, Andrés Fernández.
Por su parte, el ceo de Circulose, Jonatan Janmark, ha expresado su satisfacción por la colaboración con Mango a través de sus "servicios ampliados que permiten la adopción a gran escala, como la planificación de transición, la orquestación de la cadena de suministro y la trazabilidad".